Bienvenido al blog jurídico Viltis, donde te mantendremos al día sobre temas legales de interés. En esta ocasión, hablaremos sobre un tipo de contrato que puede ser desconocido para muchos, pero que es importante tener en cuenta en el ámbito laboral: el contrato eventual imprevisible.
Este tipo de contrato se diferencia del contrato eventual común en que su duración no puede ser determinada de antemano, ya que está sujeto a la realización de una obra o servicio de carácter imprevisible. Es decir, el empleador no puede prever cuándo terminará el contrato, ya que dependerá de la finalización de la obra o servicio en cuestión.
¿Cuándo se puede utilizar un contrato eventual imprevisible?
Según el artículo 15.1.b del Estatuto de los Trabajadores, este tipo de contrato se puede utilizar en los siguientes casos:
- Actividades cuyo ciclo productivo sea de duración incierta.
- Actividades que se vayan a realizar en el ámbito de la investigación, desarrollo e innovación.
- Actividades que se vayan a realizar en el ámbito de la producción de bienes o servicios con una duración incierta.
- Actividades relacionadas con la contratación temporal en el sector público.
Es importante tener en cuenta que este tipo de contrato no puede utilizarse en actividades que tengan una duración previsible, como por ejemplo la temporada de verano en un hotel.
Un ejemplo de un contrato eventual imprevisible podría ser el de un trabajador que es contratado para realizar una investigación en una empresa. En este caso, el contrato finalizará cuando la investigación se haya completado, sin que el empleador pueda determinar de antemano cuándo será ese momento.
Si tienes alguna duda sobre este tipo de contrato, no dudes en dejarnos un comentario. En Viltis estaremos encantados de ayudarte y aclarar cualquier cuestión que puedas tener.
