Bienvenidos a Viltis, un blog jurídico especializado en temas de derecho civil y mercantil. En esta ocasión, abordaremos un tema de gran importancia en el ámbito de los contratos: el contrato arras supeditado a tasación.
El contrato arras es una figura jurídica utilizada en la compraventa de bienes inmuebles. Consiste en un acuerdo entre comprador y vendedor en el que el primero entrega una cantidad de dinero al segundo como señal de la futura compraventa. Este acuerdo es considerado como una garantía para ambas partes, ya que en caso de incumplimiento, el dinero entregado en concepto de arras puede ser reclamado.
¿Qué significa supeditado a tasación?
Cuando hablamos de un contrato arras supeditado a tasación, nos referimos a un acuerdo en el que la cantidad de dinero entregada en concepto de arras estará condicionada a una tasación previa del bien inmueble. Es decir, el comprador entregará la señal al vendedor con la condición de que el valor del inmueble sea determinado por un tasador antes de la firma del contrato de compraventa.
Esta cláusula es especialmente útil en situaciones en las que el comprador no está seguro del valor real del inmueble o cuando existen discrepancias entre ambas partes en cuanto a su precio. De esta manera, se evitan posibles conflictos futuros y se asegura que el precio acordado sea justo para ambas partes.
En el presente contrato, ambas partes acuerdan que la cantidad de dinero entregada en concepto de arras quedará supeditada a la tasación realizada por el tasador designado por ambas partes. En caso de que el valor determinado por el tasador sea inferior al precio acordado, el comprador tendrá derecho a recuperar la cantidad entregada como señal. Por el contrario, si el valor determinado es igual o superior al precio acordado, el contrato de compraventa se mantendrá vigente y la cantidad entregada en concepto de arras se descontará del precio total de la operación.
Es importante tener en cuenta que, en caso de que el comprador decida no llevar a cabo la compraventa después de la tasación, perderá la cantidad entregada en concepto de arras. Por otro lado, si es el vendedor quien decide no continuar con la venta, deberá devolver al comprador el doble de la cantidad entregada en concepto de arras.
En resumen, el contrato arras supeditado a tasación es una herramienta útil para garantizar una compraventa justa y evitar posibles conflictos en el futuro. Si tienes alguna duda o comentario sobre este tema, no dudes en dejarlo en la sección de comentarios. ¡Gracias por visitar Viltis!