Bienvenidos a Viltis, el blog jurídico donde encontrarás información relevante sobre temas legales y contratos. En esta ocasión, hablaremos sobre un contrato muy común en el ámbito de los alquileres: el contrato de alquiler DGA.

El contrato de alquiler DGA (Depósito de Garantía Adicional) es un documento que se utiliza para garantizar el pago de una cantidad adicional en caso de incumplimiento de las obligaciones del arrendatario. Esta cantidad se suma al depósito de garantía inicial y suele ser acordada entre ambas partes en el momento de la firma del contrato.

¿En qué casos se suele incluir un DGA en un contrato de alquiler?

El DGA se suele incluir en contratos de alquiler de viviendas o locales comerciales cuando el arrendatario no cumple con ciertos requisitos o garantías que el arrendador considera necesarias. Algunos ejemplos de situaciones en las que se puede exigir un DGA son:

• El arrendatario no cuenta con un trabajo estable o una fuente de ingresos suficiente.
• El arrendatario no tiene un historial crediticio favorable.
• El arrendatario no cuenta con avales o garantías adicionales.

En estos casos, el arrendador puede solicitar un DGA como medida de protección en caso de que el arrendatario no cumpla con sus obligaciones de pago o cause daños en la propiedad.

Es importante mencionar que el DGA no es lo mismo que una fianza, ya que la fianza se utiliza para cubrir posibles daños en la propiedad, mientras que el DGA se destina a cubrir el incumplimiento de las obligaciones del arrendatario.

Esperamos que esta información te haya sido útil. Si tienes alguna duda o comentario, no dudes en dejarnos tu opinión en la sección de comentarios. ¡Gracias por leer Viltis!