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En esta ocasión, abordaremos un tema que ha generado gran controversia en el ámbito legal: el delito por no dejar ver a un hijo. Muchas veces, en casos de separaciones o divorcios, uno de los progenitores puede obstaculizar el contacto del otro con el hijo común, lo que puede derivar en consecuencias legales.
¿Qué dice la ley al respecto?
Según el Código Penal español, en su artículo 227, se establece que «el que, fuera de los casos permitidos por la ley, impida los contactos de los hijos con sus padres o con otros parientes o los niegue de manera reiterada, será castigado con la pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a 24 meses». Esto significa que, si un progenitor impide el contacto del otro con el hijo sin una causa justificada, podría ser considerado como un delito.
¿Qué se considera como un delito?
Para que se pueda considerar como un delito, es necesario que se cumplan ciertos requisitos. En primer lugar, debe existir una resolución judicial que establezca un régimen de visitas o un acuerdo entre los progenitores que permita el contacto con el hijo. Además, el progenitor que impide el contacto debe hacerlo de manera intencionada y reiterada, es decir, no se considera delito si el impedimento es puntual o justificado por alguna razón de fuerza mayor.
Consecuencias legales
Como se mencionó anteriormente, el delito por no dejar ver a un hijo puede conllevar una pena de prisión o multa, pero también puede tener otras consecuencias legales. El progenitor afectado puede solicitar una modificación del régimen de visitas o incluso la custodia compartida, si se demuestra que el otro progenitor no está cumpliendo con sus obligaciones respecto al contacto con el hijo.
En casos extremos, se puede iniciar un proceso de alienación parental, en el que se demuestra que el progenitor que impide el contacto está manipulando al hijo para que se aleje del otro progenitor. Esto puede tener graves consecuencias psicológicas para el menor y, por lo tanto, es un tema que se toma muy en serio en el ámbito legal.
Es importante recordar que, en situaciones de separación o divorcio, lo más importante es siempre el bienestar del hijo. Por lo tanto, es necesario que ambos progenitores colaboren y cumplan con sus obligaciones para garantizar un ambiente saludable para el menor.
Si tienes alguna duda o comentario sobre este tema, no dudes en dejarlo en la sección de comentarios. En Viltis estaremos encantados de ayudarte y brindarte la información que necesites.
