Bienvenidos al blog de Viltis, un espacio dedicado al análisis jurídico de temas relevantes en la actualidad. En esta ocasión, hablaremos sobre un delito que ha tomado relevancia en los últimos años: la receptación en Perú y su aplicación en España.
¿Qué es la receptación? La receptación es un delito que consiste en adquirir, recibir, ocultar o transportar bienes provenientes de un delito. Es decir, cuando una persona recibe o compra objetos que han sido robados o obtenidos de manera ilícita, está cometiendo el delito de receptación.
Receptación en Perú
En Perú, la receptación está tipificada en el Código Penal como un delito contra el patrimonio. Se considera receptador a aquella persona que, a sabiendas, adquiere o recibe bienes provenientes de un delito y los oculta, guarda o vende.
La pena por receptación en Perú puede ser de hasta 8 años de prisión, dependiendo del valor de los bienes receptados. Además, el Código Penal también establece que si el receptador es un funcionario público, la pena se aumentará en un tercio.
Aplicación de la receptación en España
En España, la receptación está regulada en el Código Penal como un delito de encubrimiento. Se considera encubridor a aquel que, con conocimiento de la comisión de un delito, ayude al delincuente a eludir las consecuencias legales o a aprovecharse de los bienes obtenidos del delito.
La pena por encubrimiento en España puede ser de hasta 3 años de prisión, y en caso de que el encubridor sea un familiar o cónyuge del delincuente, la pena puede ser de hasta 6 años de prisión.
Ambos delitos, receptación en Perú y encubrimiento en España, tienen como objetivo combatir la impunidad y proteger el patrimonio de las personas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada país tiene sus propias leyes y sanciones para este delito.
Esperamos que este artículo haya sido de utilidad para comprender mejor el delito de receptación y su aplicación en Perú y España. Si tienes alguna duda o comentario, no dudes en dejarnos tu opinión abajo. ¡Hasta la próxima!
