Bienvenidos a Viltis, el blog jurídico del ámbito español donde encontrarás información relevante sobre temas legales. En esta ocasión, hablaremos sobre un tema que puede resultar complicado y emotivo: el testamento en casos de Alzheimer.
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que afecta principalmente a las personas mayores, y que va deteriorando progresivamente las funciones cognitivas y la memoria. En etapas avanzadas, los pacientes pueden perder la capacidad de tomar decisiones y gestionar sus asuntos legales.
¿Qué es un testamento?
Antes de adentrarnos en el tema del testamento en casos de Alzheimer, es importante entender qué es y para qué sirve. Un testamento es un documento legal en el que una persona expresa sus últimas voluntades y cómo quiere que se repartan sus bienes después de su fallecimiento.
Existen diferentes tipos de testamento en España, como el testamento ológrafo (escrito a mano por el testador), el testamento abierto (ante notario) y el testamento cerrado (en presencia de testigos). Cada uno tiene sus requisitos y formalidades específicas.
¿Qué ocurre si una persona con Alzheimer quiere hacer un testamento?
En el caso de que una persona diagnosticada con Alzheimer quiera hacer un testamento, es importante tener en cuenta que debe tener la capacidad mental y cognitiva necesaria para entender lo que está haciendo y tomar decisiones informadas.
Si el paciente aún tiene capacidad para entender y expresar sus últimas voluntades, puede realizar un testamento válido ante notario o por escrito. Sin embargo, si la enfermedad ha avanzado y la persona no tiene capacidad mental suficiente, no podrá hacer un testamento.
¿Qué ocurre si el testamento se hace cuando ya hay síntomas de Alzheimer?
En este caso, puede haber situaciones en las que se cuestione la validez del testamento debido a la capacidad mental del testador. Si se demuestra que la persona no tenía capacidad mental para entender y expresar sus últimas voluntades en el momento de hacer el testamento, este podría ser declarado nulo.
Por lo tanto, es importante que si se sospecha de una posible incapacidad mental del testador, se realice una evaluación médica y se obtenga un informe que certifique su capacidad en el momento de hacer el testamento.
¿Qué ocurre si una persona no hace testamento y es diagnosticada con Alzheimer?
En este caso, la ley establece un orden de sucesión en el que se repartirán los bienes de la persona fallecida. Sin embargo, si la persona con Alzheimer no tiene familiares cercanos, sus bienes podrían quedar en manos del Estado.
Por lo tanto, es recomendable hacer un testamento lo antes posible para asegurarse de que los bienes se repartan según las últimas voluntades del testador.
Esperamos que esta información te haya sido útil y te ayude a entender mejor cómo funciona el testamento en casos de Alzheimer. Si tienes alguna duda o quieres compartir tu experiencia, ¡no dudes en dejarnos un comentario!
